Mi amigo Gama, asiduo al blog me dijo hace un rato por messenger que me tenía una noticia para publicar, me mandó un link del periódico El País y para cuando terminé de leer no sabía si reirme o agarrar rabia. La nota fue la siguiente...
Resulta ser que en Canadá, Nathalie Blanchard, una chica con depresión, dejó su trabajo en IBM cuando fue diagnosticada hace año y medio. La cuestión fue que la companía aseguradora que pagaba a Nathalie una pensión por su condición médica, tuvo acceso a unas fotografías de la joven muy sonriente, disfrutando unas vacaciones en la playa con sus amigas. En el artículo no nos cuentan cómo exactamente llegaron estas fotos a la posesión de la compañía de seguros, Manulife, sólo nos cuentan que las consiguieron a través de Facebook, así es y ahora, la compañía se ha reusado a seguir pagando la pensión de la chica pues aseguran que esas fotografías demuestran que está totalmente curada de su depresión.
Nathalie asegura que dichas fotografías se deben a unas vacaciones recomendadas por su médico, para ayudarla a superar su problema, pero la compañía alega que dichas fotogafrías no son las únicas pruebas que tienen en contra de la chica.
Así que... ¿qué les parece?
Pues si me preguntan mi opinión, me parece que los de la aseguradora son unos pasados, creo que deben tener muy buenas pruebas además de esas fotografías, porque no creo que Facebook sea el mejor psiquiatra, como para andar diagnosticando si ya estás curado de cierta enfermedad o no, pero bueno, esperemos a ver si salen a la luz las otras pruebas.
Por ahora, les cuento una anécdota personal. Yo si creo que facebook es un peligro muchas veces, a parte de ser muy divertido con todas las aplicaciones y lo chévere de mantenernos en contacto con personas que jamás pensamos volveríamos a ver en la vida, tiene su lado negativo también.
Bien recuerdo una tarde que estaba full estresada, ni recuerdo por qué, la cuestión es que antes de conocer Twitter, yo hacía mis actualizaciones de estatus unas 15 veces al día (al menos) en Facebook, la cosa es que un buen día escribí un pensamiento como: "Salgo a dar una larga caminata porque sino voy a explotar. No aguanto más esto." Bueno, me fui tranquilamente a dar mi larga caminata y cuando regreso a mi casa me encuentro a mi mamá con la típica mirada de mamá preocupada, me sienta en mi cama y me dice: "Me llamó tu tía Claudia, que está preocupada por tí. Me preguntó si estás bien porque publicaste un mensaje suicida en Facebook." Mi reacción fue partirme de risa en la cama, después de todo ya no estaba estresada con esa larga caminata. Mi punto es que Facebook deja mucho espacio a la interpretación y de la misma forma como mi tía Claudia tergisversó terriblemente mis palabras, es posible que esta aseguradora lo haya hecho con las fotogafrías de esta muchacha o tal vez no, quien sabe.
Bueno, entre tanta depresión y suicidio y todo lo demás mejor los dejo con un chistecito geek que me fascina...
Primera fila
- La solicitud del usuario.
- Lo que entendió el líder del proyecto.
- El diseño del analista del sistema.
- El enfoque del programador.
- La recomendación del consultor externo.
Segunda fila - La documentación del proyecto.
- La implantación en producción.
- El presupuesto del proyecto.
- El soporte operativo.
- Lo que el usuario realmente necesitaba.
1 comentarios:
OK Yenny, te explico lo que pasa
En parte , se ve como que inhumano por parte de las políticas de la empresa de seguro, pero después analizando y buscando información me di cuenta que las compañías aseguradoras debido a los grandes fraudes que suceden con frecuencia en países de Europa como también en Estados Unidos, las aseguradoras tienen departamentos completos de investigación dedicadas a buscar casos como este.
Lo que me lleva a pensar mucho sobre el tema, si la tipa estaba deprimida como diantres sale en sus fotos de facebook riendose y feliz en una fiesta ósea, también ahí que ver eso
gracias
y excelente tema
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